Pasados 7 días del Domingo de todos los Domingos, y con la alegría de estar celebrando la Pascua de Resurrección del Rey de los Hombres, queremos hacer un resumen de todo lo vivido el pasado Domingo de Ramos.
Que podemos decir del día más esperado del año para nuestra Hermandad, nuestro Domingo, el Domingo de Ramos, el día en el que nuestros sueños de todo un año se hacen realidad.
Pero este año, sabíamos que volveria a ser especial, pero muy distinto al del año pasado, y totalmente distinto al Domingo de Ramos que ya estamos soñando para el próximo año.
Para este año, queríamos que el Rey del Consuelo estuviera situado en el Altar Mayor de la Basílica, como si estuviera en su paso de misterio, con sus mismas flores, sus rosas rojas.
Así mismo, Madre de Dios de la Misericordia, volvería a estar situada bajo el coro de la Basílica de la Madre de los Jerezanos, bajo su palio, y con las orquídeas que en los últimos años conforman su exorno floral.
Todo empezó temprano, tras la Misa de Palmas que comenzó a las 8.30 de la mañana. A partir de ese momento comenzó un nuevo Domingo de eterno Consuelo y Misericordia.
El Administrador de la Diócesis, Don Federico Mantaras fue el más madrugador en ofrecer su ofrenda en forma de oración hacia nuestros Titulares. Posteriormente, fueron los responsables municipales quienes se acercaron a la Basílica.
Dieron las 11h y dio comienzo la Misa de Hermandad, en la que se permitió la entrada a la Basílica hasta completar el aforo permitido. Dar las gracias nuevamente tanto al Coro de Capilla San Pedro Nolasco como al cuerpo de acólitos que siempre nos acompañan en nuestras celebraciones.
Tras la finalización de la Eucaristía se volvieron a abrir las puertas de la Basílica, empezando a formarse largas colas para poder entrar.
Durante la mañana, nuestra Hermandad entregó a Doña Maria Luisa Cuñado de Azcárate, Camarera de Madre de Dios de la Misericordia, una serie de detalles por el amor que profesa a nuestra amantisima titular.
Antes del cierre de las 14h, recibimos a nuestros Hermanos de la Hermandad de la Soledad, y al Presidente de la Unión de Hermandades de nuestra ciudad.
La Basílica volvió a abrir sus puertas para recibir a los Hermanos que participarían en el Rezo de las Preces que se organizó como acto penitencial. Para este acto la imagen de Nuestro Padre Jesús del Consuelo fue dispuesto en el Altar para una visión más cercana.
El precioso acto del Rezo de las preces lo pueden disfrutar en el siguiente enlace.
Durante la tarde la Cuadrilla de costaleros de Madre de Dios de la Misericordia y componentes de la Banda de Cornetas y Tambores de Nuestra Señora del Rosario de Cádiz, acudieron a realizar ofrendas florales.
Organizado por la Peña Flamenca «La Buena Gente», Tomás Rubichi canto una saeta a cada uno de nuestros Sagrados Titulares. En los siguientes enlaces las pueden escuchar.
Durante la jornada realizamos ofrendas florales a todas las Hermandades del Domingo de Ramos de nuestra Ciudad.
También recibimos la visita de representantes de la Hermandad de la Borriquita.
Lidia Hernández volvió a sorprendernos rezandole una Plegaria al Señor del Consuelo como muestra de su devoción.
El grupo flamenco «Quejío Andaluz» también quiso participar en este Domingo de Ramos tan especial cantando las Plegarias a nuestros Sagrados Titulares.
Tras una jornada intensa y distinta de Domingo de Ramos, cerramos las puertas de la Basílica de la Merced, deseando que el Domingo de Ramos del próximo año sea muy distinto a éste, y podamos realizar Estación de Penitencia a la Santa Iglesia Catedral.
Para finalizar queremos agradecer a la Comunidad de Padres Mercedarios por su total disposición con nuestra Hermandad; a los Hermanos, devotos y cofrades por la asistencia durante toda la jornada, y por su paciencia ante las largas colas que se produjeron durante toda la jornada; a los fotógrafos y medios de comunicación por la difusión del Acto ; y como siempre, al Coro de Capilla San Pedro Nolasco y al cuerpo de acólitos por su entera disposición siempre con nuestra Hermandad.
Muchas gracias a todos y viva Cristo Resucitado.
Hermandad del Transporte 